Afrontamos el sábado con un poco más de energía que el día anterior, tras una comilona que nos metimos en uno de los muchos lugares que nos ofrece Viveiro para disfrutar de buena comida y paisaje. Y tal fue la comilona que no llegamos hasta cerca de las seis de la tarde al recinto del Resu. Sin embargo, llegamos justo a tiempo par ver uno de los conciertos que más nos ha sorprendido de todo el festival, por su energía y porque a esas horas, con el sol callendo sobre nuestras cabezas, era difícil conseguir lo que los Skindred consiguieron, montar la fiesta y ponerte las pilas para el resto del día. Mientras algunos eligieron ir a ver el espectáculo de trial, tomar unas cervecitas o descansar más, los que decidimos acudir al Main Stage nos quedamos gratamente sorprendidos de la versatilidad de un grupo que nos dejó con la boca abierta y botando sin parar con una calidad y sonido sorprendentes, consiguiendo que viviésemos la verdadera idea de un festival de música, pasarlo bien y fiestaaaa...sin duda una actuación que no pasó desapercibida y que no olvidaremos de la X Edition.
Les seguirían en el mismo escenario lo Heaven Shall Burn, otra de las bandas que fue afortunada con el sonido (a pesar del viento que jugaba malas pasadas), por lo que el día de hoy prometía y mucho. Con los pit que se montaron en el público y con sus incondicionales acompañando en cada tema, los germanos daban paso a la actuación de Moonspell (coincidiendo con la actuación de Dog Eat Dog). Los de Portugal se metieron al público en el bolsillo y dieron muestra de profesionalidad llegando a sonar destacablemente bien en un escenario en el que el resto de bandas no había dado la talla. Una gran actuación de un grupo que no habíamos visto nunca y del que habíamos escuchado maravillas. No defraudaron en absoluto.
A eso de las nueve de la noche (con un poco de retraso) aparecía en el escenario principal Danko Jones, dando muestra de su simpatía ya desde el primer tema en el que pidió que se le cortase el humo ya que su música no era de esa "tipo dragones e historias de miedo". Un concierto muy animado en el que conectó con el público desde un principio y con el que consolidó su fama de "entrañable" al subir a los niños del ResuKids para que bailasen un tema con él (algo similar a lo que había pasado el jueves con Suicide of Silence).
Pasaban ya de las once y media cuando Korn subía al escenario y el recinto del Resurrection se volvía a llenar esperando la actuación de éstos. Sonido correcto y un espectáculo de luces y humo muy amplio, hicieron de este uno de los conciertos del día, aunque no todo el público lo disfrutó al máximo y el cansancio se hacía más que notable al ver a muchísima gente sentada detrás de la pantalla del escenario principal. A nosotros nos pareció una gran actuación con un sonido muy en su línea que cumplió nuestras espectativas en todo momento.
Una traca final de fuegos artificiales, ponían el broche do oro a la actuación de Korn y anunciaban la recta final del festival. Volvían a coincidir Behemoth y Satanic Surfers y tras ver un poquito de cada uno, nos tomamos un descansito para prepararnos para Fear Factory.
Los americanos hicieron honor a su nombre y sonaron de "miedo", pero no en sentido metafórico, si no en todo su sentido horroroso que os podáis imaginar. Se dice por ahí que a mitad de concierto empezaron a sonar mejor...pero sinceramente, no esperamos a ese momento. Nos dimos la vuelta y dejamos a nuestras espaldas la décima edición del Resurrection Fest con todos sus buenos y malos momentos, pero los buenos serán imborrables y quedarán marcados a fuego en nuestras memorias... X EDITION